sábado, 15 de octubre de 2016

Dia 3

7 de octubre, lloviendo todo el puto día.


Esto se llama Kaya.
Es una pasta propia de Singapur para comer con pan.
Es lo que desayuné cada día.
Se hace con coco, huevo y azúcar.

En mi lista de cosas que hacer tenía dos nombres de sitios apuntados que en recepción me indicaron que se encontraban muy cerca el uno del otro.
Sin embargo, cuando llegué a la parada, en el propio mapa que tienen las estaciones donde todos los sitios de interés están marcados no había ni rastro. Aun así decidí salir a la calle con mi paraguas prestado por el hostal y dar una vuelta por la zona. Me encontraba en todo el meollo de los rascacielos.




Como buen cateto de pueblo flipando con los edificios altos.


Esto pensé así de lejos que seria un templo, venía marcado en el mapa.
Pero no, eran unas galerías de comida.


Lo más pintoresco de la zona.
De vuelta al metro.
Al jardín botánico.


Los jardines botánicos de Singapur son patrimonio mundial por la UNESCO.



Son fotos de verde.
Tampoco me voy a poner a divagar.








Aquí empezaba una zona llamada "Jardín de la evolución".
Simplemente cuenta como aparecieron las plantas en el planeta y su historia hasta hoy.
Mediante carteles al lado del camino y la correspondiente planta.


Los arboles también se hacen fósiles!



Dice que las hojas son buenas para el suelo de los jardines.
Que no las recojáis.


Un techo! Selfie!


En lo más alto estaba la zona de descanso y tienda de regalos.


Fideos bicolor con marisco y té con limon.

Por supuesto, tras pasar toda la mañana allí me volví al hostal a descansar otras horitas y luego volver a salir. Esta vez ya sí al hotel Marina Bay Sands. A la vera de este hotel está también un parque llamado Gardens By The Bay, los jardines de la bahía. Primero los anduve un rato y luego entré al hotel, y por poco no salgo del mismo escaldado!


Desde abajo por delante.


Y por detrás.





Creo que se puede subir ahí entre los arboles en plan mirador.
Que le den, de verdad.


Mucho visitante aquí, como es normal.
Especialmente grupos de estudiantes.



El parque posee dos invernaderos de pago.
Yo ya había tenido suficientes plantas.



Se ve que alguna nutria se puede cruzar en el camino.
A mi no se me cruzó ninguna.
Entre esto y la fuente... menudo viaje de mierda! jaja.



Yo quería jugar con el agua.
Pero es solo para niños de entre 6 y 12 años.
Me puede salir algo bien hoy?




Vamos a comer algo y ya al hotel de una santa vez.


Me gustaron este puesto y uno de chinas adorables donde compré un té con leche.


Los satay, o brochetas, si son una comida característica de Singapur.
Cordero, pollo, ternera y salsa de carne.
Tenían un toque así dulce pero especiado muy guapo.
7 Dólares.



A lo mejor soy un exagerao pero a mi me impresionaba!


En este complejo a espaldas del hotel hay tiendas caras, gimnasio y un museo.


La zona con colorines es la recepción.


Y nada, las tres torres son de este palo.

Bien. Lo que pasó:
Al mirador/bar/piscina se accede desde un ascensor que está en esta planta, a ras de suelo. Sin embargo los tickets para subir se compran en el sótano 1. Yo eso no lo sabía.
Me dirigí al ascensor y había una chica en un mostrador que me preguntó a cual de las 3 zonas iba, porque eran plantas distintas. Yo le dije al mirador, pensando que si había que pagar algo me lo iba a decir en aquel momento. No lo hizo, me dio paso.
En el ascensor iba mucha gente, y al llegar arriba (57 plantas), había una mujer que pedía los tickets, lo cual yo me perdí en ese momento por un motivo. Por su acento y mi distracción y que estaba lidiando con todos nosotros pensé que simplemente estaba saludando o algo así, asentí y me dirigí a la puerta del mirador.
Ya casi entrando oigo unas voces, me detengo y miro hacia atrás pero no veo a nadie que se dirija a mi ni me pare ni me haga gestos, pienso que es entre los trabajadores y me meto. Doy una vuelta, echo fotos y salgo.
Madre mía al salir, la tia to enrrabietá diciendo que porque me meto sin ticket, que iba a llamar a seguridad, que me había llamado la atención y la había ignorado, en fin, la tia bastante enfadada y supongo que en su derecho. En Singapur las multas no son ninguna broma y te crujen por cualquier cosa, como fumar o comer chicle por la calle, así haciendo gala de mi mejor cara de gatito herido y balbuceando como un cobarde la logré convencer de que no, que bajaba a comprar el ticket y se lo daba, que había sido una confusion... Pero sinceramente, visto desde su perspectiva mi justificación era una mierda.
Y aquí están las fotos en cuestión. He de decir que estaba bastante tembloroso durante la salida al mirador. Tan alto! Y la peña ahí apoyándose en el cristal, o tirada en el suelo, to relajaos. Y yo andando rápido echando fotos deseando salir. Qué vertigo. Tengo que hacer algo al respecto de mi fobia.


Ahi a la izquierda los invernaderos y Gardens by the bay.


El Flyer que vimos ayer.


Esto no hace falta ni comentarlo.


Tremenda ciudad y tremendas vistas.


Para cenar una paradita en el indio de al lado del hostal.
Coca cola, pollo tikka y prata de queso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario